
¿Propósitos para el 2008? Bueno, pues no sé, improvisaré. A mi esas chorradas como que no me van, respetando profundamente a los que las practican, ojo. Este año he estado a punto de empezarlo sin uvas ya que tenía pensado revelarme contra la tradición, sin embargo, no he podido resistirme ya que me encantan y, estando con toda la parentela reunida, pues no podía quedarme fuera del cómico cuadro de poco más de diez personas luchando por no atragantarse o estallar en carcajadas. Lo de la prenda roja y demás, nada de nada, y uvas han sido once. La número doce llegó con retraso, bien por un fallo técnico de la persona que las fue metiendo en bolsitas o bien porque yo me debí de tragar dos de golpe y ni me enteré, tan concentrada como estaba, el caso es que tuve que robar de una bolsita huérfana que rulaba por ahí. Y después de que todo terminara, no salí. La verdad es que sólo he salido un año, que yo recuerde, ya que soy más de quedarme con la familia, lo prefiero. Además, como os podréis imaginar, en León hacía una temperatura de morirse, literalmente claro, y como en casita en ninguna parte. Lo pasé bastante bien disfrutando de mis primos, a los que hacía muchísimo que no veía, echando partidas a la Wii, que me ha enganchado totalmente y pienso comprármela en cuanto pueda, y al pin-pon, que no sabía jugar.
Pero todo lo bueno se acaba, por desgracia, y ahora aquí estamos de vuelta al curro. Menos mal que ya es viernes y que hoy comienzan otras minivacaciones que me duran hasta el martes, incluido. Lo único que siguen siendo con la familia, esta vez del lado paterno, y me entra urticaria sólo de pensarlo ya que mi cupo familiar ya está cubierto y más que cubierto. No tengo ninguna gana de más reuniones familiares, en serio, ¡qué coñazo! En fin, ya contaré qué tal. Besos gente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario