No sé por qué pero tengo una sensación extraña dentro de mí. Estoy eufórica, de mal café, me siento borde y prepotente. Y me gusta, me encanta, hacía tiempo que no me sentía así y lo echaba de menos. Tenía miedo de haber perdido para siempre esta sensación. Siento como si el mundo fuera mío, como si nadie pudiera hacerme frente, siento que soy un volcán a punto de entrar en erupción, siento que no hay nada ni nadie que pudiera pararme y, lo que mejor me hace sentir, siento que puedo hacer lo que me plazca, cómo me plazca y con quien me plazca. Y tengo deseos de hacer daño, lo confieso. Me gustaría poder hacer sentir mal a alguien, me gustaría ver sufrir a alguien y ver su mirada de asombro al descubrir una sonrisa de puro placer en mi cara.. Me encanta ver en un espejo mi cara de niña buena y en mi interior saber que es pura fachada.. Me encanta que se piense tan bien de mí cuando realmente no se tiene ni idea de hasta dónde puedo llegar..
Tengo ganas de morder, ganas de sentir, ganas de morir.. Me siento arder, mi interior esta quemándose. Y con el paso del tiempo se aviva más y más.. El fuego demasiado intenso puede destruirse a sí mismo, curioso, ¿no es así? Mmm..
Me voy, estoy cansada y me esperan dulces momentos a solas pensando.. cosas.
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