¡Tengo coche nuevo! Run, run, run...

Bueno, pues mi regalo de Navidad ha sido el coche del que os hablé, que por fin ayer fui, por la mañana, al banco a firmar el crédito para pagarlo. Pero con respecto a este tema tengo mucho que contaros, así que empiezo; como recordaréis, yo tenía un Golf Cabrio descapotable del 79, y lo sigo teniendo, pero cuando os conté que lo había llevado a la ITV y me lo habían "tirado" por las luces, lo llevé a un taller que me recomendaron para que lo pusieran a punto. Pues bien, el coche entró en el taller estupendo, salvo las pequeñas incidencias, y me lo devolvieron hecho una castaña, en serio. Cuando fui a recogerlo aquello sonaba a trasto que no os podéis imaginar, petardeando y todo por el tubo de escape. Yo estaba alucinada pues jamás, en el año que lo he tenido, lo había visto tan mal. Los mecánicos me dijeron que se trabata de la válvula de arranque, que había que cambiarla y que costaba 400 € pero como, supuestamente, podría sobrevivir sin ella, les dije que no podía permitirme ese dinero en ese momento y me llevé el coche. El día que lo saqué, me recomendaron que lo tuviera arrancado un buen rato antes de volverlo a llevar a la ITV y así lo hice, me lo llevé a ver a una amiga que estaba currando y lo tuve una hora petardeando para que no me diera problemas por los humos. Cuando ya estuve a punto de irme, me dio por ver si todo lo que supuestamente le habían arreglado funcionaba bien y no fue así pues, por ejemplo, las luces antiniebla (que una no funcionaba), no encendía ninguna, y el claxon tampoco iba cuando supuestamente estaba arreglado... Llamé al taller para decirselo y me dijeron que se lo llevara de nuevo, cosa que hice y bueno, un número porque el claxon se quedó igual que estaba y sólo conseguí salir de alli con dos luces antiniebla en lugar de ninguna.

Al llegar a la ITV, después de mirarme las luces de freno y ver que funcionaban, me pidieron que moviera el coche a la siguiente "prueba" y, cuando estaba acelerando, hico un ruido súper raro (como acelerar más y venirse abajo de golpe) y se apagó. Traté de volverlo a arrancar pero no hacía ningún intento ni sonido. El chico de la ITV se montó para intentarlo él y tampoco pudo por lo que me dijo que lo empujaria hasta el final del tunel y que lo dirigiera yo, que una vez en el otro extremo trataría de arrancarlo de nuevo. Cuando se volvió a subir, vinieron dos chicos más y entre una amiga, que venía conmigo, y yo, empujando los cuatro, lograron que reviviera, ¡menudo susto! Y menudo pitorreo cuando entré en la oficina para buscar mi pegatina nueva, porque el coche pasó la ITV, yo quería convertirme en avestruz para meter la cabeza en un hoyo y esconderme, ¡jajaja!

Pero aqui no acaba la cosa. Los chicos nos dijeron que no paráramos el coche por si nos volvía a dejar tiradas y yo, pensando que sería cosa de gasolina porque estaba bajo, lo llevé a la gasolinera, lo paré y lo llené. Pues no arrancó después y ni yo ni los gasolineros pudimos arrancarlo así que me tocó "estrenar" seguro y llamar a la grúa para que viniera a recogerlo. Desde entonces lo tengo aparcado en un techado y sigue sin arrancar. Ahora al menos hace el intento pero nunca lo consigue así que bueno, cuando pasen las navidades lo llevaré a otro taller con bastantes mejores referencias que el anterior (menudos chorizos) y que me lo miren porque quiero bajarlo a casa ya que la idea de venderlo, cosa que mis padres quieren que haga, es totalmente inaceptable.

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Y el coche nuevo, el Ford Fiesta ST, también tiene una historia. Veréis, ese coche se lo compró mi hermano antes del verano a escondidas. ¿Por qué a escondidas? Pues porque mi hermano, aunque tiene la edad, no tiene carné de conducir y como tenía un sueldo y trabajaba bastante lejos de casa, pues compró el coche. Ya anteriormente había querido comprar un Opel Astra deportivo pero necesitaba un aval y todo el mundo se negó a avalarlo para esa compra, pero para este coche nadie le pidió ese requisito porque no lo financió por el concesionario sino por una financiera (no sé cuál) que, además, le saca un millón de más al precio del coche. Pues bien, el día que el concesionario puso el coche en la calle para que mi hermano lo recogiera, la policía se lo llevó al depósito con la grúa porque lo habían matriculado mal ya que no coincidían modelo y matrícula, y el coche se ha tirado en el depósito desde julio hasta noviembre. Mi hermano varias veces había dicho que lo había sacado pero nunca fue cierto, y eso que había pedido un crédito para hacerlo pues cada día que el coche pasaba en el depósito eran 21 € los que había que pagar.

Hace como tres semanas, cuando mis padres decidieron que el coche había que venderlo pues estaba generandole a mi hermano, y a ellos, muchos gastos, descubrimos el tema de que el coche no había salido nunca del depósito y mi padre tuvo que coger un avión y el AVE para ir a recogerlo a Zaragoza, que es donde antes trabajaba mi hermano, ya que en el depósito habían dicho que se iba a llevar el coche al desguace ya que nadie se hacía cargo de él. El pago que había que hacer por sacarlo era de 4000 € pero tuvimos la grandísima suerte de que lo rebajaron a 1000 € ya que, cuando mi padre llegó al depósito, el hombre que estaba allí se quedó alucinando cuando vio el dato en el ordenador y se debió "apiadar" de la situación. Ese mismo día bajaron el coche mis padre y mi hermano desde Zaragoza a Madrid y se habló el que yo me lo quedara por varias razones; porque me lo vendían por la mitar de lo que cuesta nuevo, porque yo me había quedado sin coche hasta a saber cuándo y porque el coche, todo hay que decirlo, es una auténtica pasada (lo único que le falta es un CD MP3, el resto de equipación es una pijada) Además, tiene tres CV más de potencia que el Opel Astra de mis padres, el coche del que estoy profundamente enamorada y que espero algún día heredar, por lo tanto ya me voy entrenando para conducirlo (el ST tiene 150 CV y el de mis padres 147).

Lo demás ya os lo he contado al principio, lo de que ayer ya pagué el coche, y menos mal porque llevaba diez días esperando que me concedieran el crédito. Ahora sólo me queda ir a Alcorcón, a tráfico, a sacar el duplicado de los papeles (porque mi hermano perdió todo) y ponerlo a mi nombre.

Sí, ya sé que el coche es mucho coche para un conductor novel pero tengo cabeza, en serio. Me gusta conducir mucho y sí, me gusta correr, pero sé muy bien que aún tengo mucho que aprender y no quiero ni matarme ni hostiarme y quedarme sin buga, ¡con lo bonito que es! Poco a poco ya le voy cogiendo el truco y, en comparación al primer día, ya voy mucho más suelta y hasta alguna vez lo he puesto en quinta y dado un poco de zapatilla. Me pico, me pico mucho con la peña, cuando se conduce ya se empiezan a ver las burradas del personal y bueno, ya que con este coche puedo, cuando puedo, siempre se la juego a alguien, ¡jajaja! Además, creo que en poco tiempo me habré aprendido todas las "madrileñadas" y eso siempre me vendrá bien en el futuro...

Bueno, un besote y trataré de seguir actualizando, a ver si no tengo demasiado trabajo.